¿Cuánto puede valer tu cuerpo?

En 1908, el médico francés Alexis Carrel logró hacer una transfusión de sangre entre dos personas lo que abrió la puerta a la posibilidad de recibir tejidos y órganos de otros individuos. Con ello nació el comercio de partes del cuerpo humano, que en muchos países se valúan como mercancías sujetas a oferta y demanda. En México, este comercio está prohibido. Sin embargo, la cifra de pacientes en espera de un trasplante de órgano o tejido asciende a 100,000, aunque la cifra oficial es de poco más de 4 mil.

En nuestro país hay 18,000 personas con alguna enfermedad crónica degenerativa en grado terminal, pero no todas están inscritas en la lista de espera de órganos o tejidos.

La legislación

La mayor parte de los países sanciona el comercio de órganos y tejidos humanos. En México lo prohíben la Ley General de Salud (en sus artículos 330 al 342) y el Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Control Sanitario de la Disposición de Órganos, Tejidos y Cadáveres de Seres Humanos de julio de 1985. El CENATRA y el Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea (CNTS) norman los procedimientos de adquisición de órganos y tejidos.

El mercado negro de valores corporales Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el mundo se realizan anualmente 70,000 operaciones que involucran el trasplante de algún órgano y cientos de miles de tejidos humanos; sin embargo, esto no es suficiente.

En Estados Unidos la lista de espera es de 82,000 personas y sólo hay aproximadamente poco más de 5 mil donantes disponibles.

De acuerdo con el CENATRA, en México es difícil realizar trasplantes al margen de la ley porque se requiere un equipo de cuando menos 70 especialistas y un instrumental altamente sofisticado. Actualmente, tan sólo existen 241 centros autorizados.

 

Inventario de órganos

Riñón

Casi la mitad de los trasplantes que se realizan anualmente en el mundo involucran un riñón. El precio de este órgano puede ir de un mínimo de $1,000 dólares, en caso de que el donador provenga de la India o África, hasta los $10,000 dólares, en caso de que el riñón provenga de un donante peruano. Esto, sin mencionar que en Estados Unidos el precio al consumidor final puede ascender hasta $30,000 dólares.

Hígado

Al ser éste un órgano extremadamente delicado, su precio de venta en caso de donante fallecido es de $53,000 dólares y hasta de $65,000 dólares, en caso de un donador vivo.

Páncreas

Esta glándula requerida por enfermos de diabetes tiene un precio de hasta $17,000 dólares en precio al receptor.

Esperma

Una "descarga" de esperma es valuada entre los $50 dólares en Australia y los $75 dólares en bancos de semen de Estados Unidos.

Óvulos

El precio de un óvulo varía de los $1,200 dólares exigidos por donadoras del interior de China hasta los $5,000 dólares ofrecidos por la empresa Clonaid (la misma firma propiedad de la secta de los raelianos que presume haber donado a un ser humano). El precio de un óvulo es mucho mayor al de una carga de esperma humano debido a que el proceso de extracción es mucho más complejo y la mujer tiene una cantidad limitada de óvulos en su cuerpo.

Córneas

Se reporta que un par de córneas provenientes de algún prisionero chino ejecutado pueden alcanzar fácilmente los $5,000 dólares.

Corazón

Un corazón en buen estado llega a tener un precio de hasta $33,000 dólares en el mercado estadounidense, aunque la familia del donador solamente recibe una fracción, en virtud de que la mayor parte del dinero queda en manos del intermediario (conocido como organ broker)

Sangre

Una unidad de sangre (es decir, 400 centímetros cúbicos) tiene un valor de venta aproximado de $20 dólares en precio del donador al cliente en China. Sin embargo, en regiones de América Latina se reporta que la sangre de familiares de algún paciente sirve para financiar servicios médicos de gente que no tiene dinero para pagar.

Intestino delgado

El intestino delgado es un órgano sumamente delicado, cuyo precio tiene un costo aproximado de $90,000 dólares debido a la poca demanda que existe.

 

Más de $250,000 dólares post mortem

 

• Nota: Los precios no incluyen operación.
• En México se realizan 30,000 trasplantes al año, cifra que lo coloca en el tercer lugar en América, luego de Estados Unidos y Brasil.
• Para 2020, en el mundo, una de cada dos personas requerirá trasplante de algún órgano o tejido, según el Centro Nacional de Trasplantes, CENATRA.

Información: CENATRA

¿Hablar sólo es síntoma de desequilibrio mental?

No en todos los casos, y es tan frecuente que se puede decir que es una conducta normal. En opinión de la doctora Nancy Steinberg, psicóloga y psicoterapeuta, “en algunos casos, hablar solo es un signo de enfermedad mental, pero está acompañado de otros síntomas y no es el más importante de ellos. Por ejemplo, en la esquizofrenia, va acompañado de alucinaciones y delirios; la persona se aísla socialmente y sus ideas están desconectadas”, señala.

La conducta de hablar solo ayuda, según Steinberg y otros profesionales, a centrar la atención, disminuir el estrés, liberar las emociones, así como a tomar mejores decisiones. Algunos especialistas en estrés postraumático, por su parte, aseguran que una excelente terapia para rehabilitarse emocionalmente es la de poner palabras a los sentimientos para, de esta manera, poder eliminar las malas experiencias que se han quedado en la memoria emocional.

Descubrimientos realizados en 2010 por los doctores en psicología Gary Lupyan, de la Universidad de Wisconsin-Madison, y Daniel Swingley, de la Universidad de Pensilvania, comprobaron que esta conducta beneficia la salud mental. El estudio se realizó con un grupo de personas de diversas edades y sexo, quienes observaron 20 imágenes con diferentes artículos, al finalizar la secuencia de fotos se les pedía que buscaran uno de estos objetos.

En una segunda prueba, los participantes volvieron a hacer lo mismo, pero esta vez, mientras buscaban el objeto, también les dijeron que lo nombraran en voz alta o para sí mismos. Como resultado, los voluntarios pudieron encontrar en menor tiempo el objeto, lo que ayudó a concluir que el discurso auto dirigido, en el aspecto visual, mejoró la memoria en los participantes e hizo que hallaran el objeto más rápido.

Ocho cosas que afectan tu olor corporal

Todos tenemos nuestro propio aroma, pero hay factores que lo modifican para bien o mal.

1. Genes: Afectan de muchas maneras tu olor personal. La más directa, a través de una familia de genes (los MHC, que varían de una persona a otra). Éstos se los debes a tu herencia, y al día de hoy no puedes hacer nada para modificarlos.

2. Condiciones ambientales: el sudor es el mecanismo termorregulador del cuerpo. Por eso, a mayor temperatura y humedad ambiente, más se suda. El viento favorece la evaporación del sudor e impide que se acumule en la piel. Siempre es mejor estar en un lugar ventilado para que evites oler mal.

3. Dieta: somos lo que comemos, pero también sudamos lo que comemos, ya que nuestra dieta determina las sustancias de desecho que el organismo elimina por medio del sudor. De ahí que, tras una noche loca, apestes a alcohol.

4. Higiene: una rutina higiénica adecuada permite eliminar el sudor presente en el cuerpo antes de que se vuelva rancio, y también controla la flora bacteriana de la piel. Y al contrario: si tu higiene deja mucho que desear, ya se sabe lo que pasa...

5.  Edad: la producción hormonal de nuestro organismo, que a su vez controla la actividad de las glándulas sudoríparas apocrinas, varía con la edad. Se activa cuando se alcanza la adolescencia, y conforme envejecemos, va decayendo.

6. Ropa: limita la transpiración (más o menos en función de su composición) y aumenta la superficie de contacto bacterias-sudor. En las prendas ya usadas permanecen bacterias que pueden pasar de nuevo a la piel. Mejor, échalas a lavar.

7. Estado de ánimo: el humor con que te levantes, lo animado que estés... afecta el olor corporal al influir en la respuesta de los sistemas nervioso autónomo y endocrino, responsables de regular la actividad de las glándulas sudoríparas.

8. Nerviosismo, ansiedad, estrés, etc.: lo dicho en el punto anterior es igualmente aplicable aquí. El grado de excitación afecta los sistemas nervioso y endocrino, y por tanto, la sudoración. Por eso, cuando estás nervioso sudas más.

¿Cuál es la emoción más intensa?

Si analizas tus recuerdos más memorables, encontrarás que están ligados a emociones poderosas, ya sean positivas o negativas. Por alguna razón, los sentimientos negativos parecen perdurar más en la memoria. Nueva investigación sugiere que la más intensa de las emociones humanas es la humillación.

Nuestras vidas están enormemente influenciadas por un amplio espectro de emociones, desde amor, felicidad y alivio hasta enojo, odio y consternación. Después de todo, son estos sentimientos que nos vuelven humanos. No obstante, existen algunas emociones que se llegan a percibir con mayor intensidad.

Los psicólogos Marte Otten y Kai Jonas, de la Universidad de Ámsterdam en Países Bajos, decidieron investigar algunas afirmaciones de que la humillación es la emoción más intensa, con grandes consecuencias personales y sociales. Algunas escenas humillantes pueden perseguir a la gente toda su vida y dejar cicatrices en las personalidades que son difíciles de reparar.

Durante el experimento, pidieron a participantes (tanto hombres como mujeres) leer historias involucrando diferentes emociones e imaginar cómo se sentirían dentro de las situaciones descritas. En una primera etapa, se comparó la humillación, el enojo y la  felicidad. Posteriormente, se comparó la humillación con el enojo y la vergüenza. Conforme los voluntarios leían, se monitoreaba su actividad cerebral. Los investigadores encontraron que la humillación suscitaba mayor respuesta que cualquier otra emoción.

El estudio demuestra que la humillación provoca presión sobre los recursos del cerebro y moviliza más poder neuronal. Sin embargo, no explica por qué sucede esto. En otras palabra, es una causa y no un efecto. Los investigadores intentarán identificar el mecanismo que conduce a esta respuesta cerebral.

Los resultados del estudio han sido publicados en Social Neuroscience.

¿Qué es el mal de la altura y cómo se puede evitar?

Los alpinistas y las personas que acostumbran subir montañas suelen padecer el llamado mal de altura. El mal de altura es el resultado del ajuste corporal a los bajos niveles de oxígeno en la atmósfera. Los síntomas incluyen: dolor de cabeza, debilidad, y agotamiento, los cuales se pronuncian más durante el segundo, tercer y cuarto día de estar a una altura elevada. Una pequeña minoría de gente comienza a experimentar estos síntomas a los 1,500 metros y una vez alcanzados los 2,400 metros o más, tienden a cancelar la diversión. El mal de altura puede usualmente ser prevenido al ascender de forma gradual. Dormir un poco más de lo usual, ingerir muchos líquidos, así como evitar el alcohol, la cafeína y la nicotina, puede ayudar en mucho. O consulta a tu médico, para que te recete algún medicamento que prevenga la inflamación en el cerebro que causa algunos de los síntomas del mal de altura.

¿Qué escuchamos antes de nacer?

En mi familia acaba de llegar una nueva integrante a la familia y viene otr@ en camino. Mi hija me preguntó qué es lo que escuchaba su prima nonata, ya que tenía claro que estaba flotando en líquido y quería saber si era similar a lo que escucha cuando nada en la piscina. Tanto mi hermana como mi esposa escuchaban música para que los bebés disfrutaran las melodías, por lo que la pregunta de mi hija era en el sentido de si escuchaban como nosotros o si era una versión distorsionada.

El sentido del oído es de los más desarrollados en el periodo embrionario. Los fetos pueden diferenciar timbres de voz, además de hacer desaparecer, en forma gradual, las frecuencias más graves. No sufren con los ruidos del tracto digestivo o el latido del corazón de sus madres, porque sus oídos los seleccionan y los hacen irrelevantes en el  conjunto de sonidos que lo rodea.