Sorpréndela con tu conocimiento de la anatomía femenina

Probablemente, la única cosa más misteriosa que la mente de una mujer es su cuerpo. Y también es probable que nunca sabrás en realidad lo que está sucediendo allá arriba, pero puedes saber muy bien lo que sucede ahí abajo y, de hecho, incluso entenderlo mejor que ella misma.

Programa su ciclo

Una mujer tiene muchas maneras para hacerte saber que su periodo menstrual está próximo; se deprime, llora, tira la vajilla y, lo peor, te manda a comprarle tampones. Pero una mujer con periodos irregulares puede no saber cuándo va a llegarle, a menos que utilices tu sabiduría de mecánica del sexo para prevenirla con anticipación. Si notas una estrechez o tirantez irregular cuando la penetres, puedes apostar que su periodo está por venir. Eso significa que tú tendrás que...

Tratarla con gentileza

Cuando tiene su periodo, su útero tiende a hincharse, por lo tanto el sexo puede serle incómodo, particularmente si tú estás acostumbrado a hacerlo muy profundamente. Retrocede y emplea embestidas pausadas y tranquilas.

Siente su dolor

Acabas de tener sexo vigoroso, y ahora ella se está quejando de un dolor pélvico. Pregúntale hace cuánto tuvo su periodo más reciente. Si te dice que hace dos semanas, ella está ovulando, y probablemente le rompiste con tu miembro un quiste (un pequeño saco lleno de fluido que envuelve al huevo). La molestia debe desaparecer en una hora.

Explícale esa molestia

Otro resultado del sexo desenfrenado puede ser una cantidad masiva de líquido transparente. Tú sabrás por la ausencia de olor que es producto de las glándulas de su vagina. Es una eyaculación femenina poco común, pero que se da durante orgasmos explosivos.

Échate la culpa

Durante el intercurso, su vagina se expande tanto a lo largo como a lo ancho. Cuando sacas tu miembro, el aire puede entrar y quedarse atrapado ahí, formando pequeñas bolsas cuando la vagina regresa a su tamaño normal. Estas bolsas de aire necesitan escapar, entonces cuando ella se pare puede hacer un mido bastante extraño. Sonríele tiernamente y dile que es algo normal derivado del sexo. (Probablemente para la próxima vez podrá perdonártelo.)

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