El tamaño de las mamas se encuentra predeterminado genéticamente y su crecimiento puede obedecer a aumentos de peso, lactancia, procesos hormonales. Algunas disciplinas, como el Tao, proponen ejercicios para aumentar de volumen, como el "del venado": sentada en flor de loto, se presiona con un talón la apertura vaginal, se masajea los senos, mínimo 36 veces y máximo 360 al día, mientras realizas contracciones ano-vaginales. Se hacen frotamientos circulares hacia adentro, con la mano derecha en sentido de las manecillas del reloj y con la izquierda al sentido opuesto. Este tipo de ejercicios requiere de estudios, dirección y comprensión de la disciplina, pero su eficacia ha sido justificada por el incremento en la producción hormonal natural que produce.
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