Por fin le has dicho a tu pareja que te vas a hacer la vasectomía, lo cual está muy bien, pero antes de llegar al quirófano debes considerar que no es una decisión a la ligera; hacerte una vasectomía es casi tan permanente como hacerte un tatuaje. Por supuesto que hay forma de revertir la operación, pero el procedimiento es caro y difícil.
Pero digamos que si, que ya te has convencido de practicártela, es momento de buscar un buen médico que haya realizado este tipo de procedimiento al menos 50 veces, para estar seguros de que se reducirán los riesgos por complicaciones.
Pero espera, no corras aun hacia el hospital, antes debes consultar con tu aseguradora, ya que aunque no es un procedimiento muy caro, en algunos casos los gastos pueden correr a cuenta de la compañía aseguradora.
De ser posible, elige el viernes como el día ideal para la operación, así tendrás todo el fin de semana para recuperarte y regresar sin pronto al trabajo.
Una vez que ya has pasado por la convalecencia, no ignores cualquier síntoma que no sea común, como inflamación, sangrado, fiebre o dolor intenso; de ser así, acude de inmediato al médico.
Ahora que una vez que todo ha pasado sin problemas, continúa practicando el sexo seguro, después de algunas semanas lleva una muestra de tu semen a analizar; una semana después de lleva otra, si ambas dan negativo, la operación fue un éxito.
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